El 11 de octubre fue, literalmente, un Big Day (un gran día). Un total de 27 personas de WCS, eBird, junto a los nuevos avistadores de aves, capacitados semanas antes, se desplazaron por diferentes sitios en la zona de los Yungas: Sucarani, Sillutinkara, Ecovía y Jucumari Lodge, para el avistamiento de aves.


Este Big Day no solo marcó una jornada de observación de aves, sino también un encuentro de esperanza y compromiso por la naturaleza. Cada mirada al cielo, cada canto identificado y cada dato registrado reflejan el poder de una comunidad que crece unida por el amor a las aves y la conservación.

La alianza entre ambas instituciones fue posible a partir del Programa de formación de nuevos avistadores de aves, a cargo de Cecilia Flores Turdera de WCS, que llamó la atención de personalidades del eBird. Así lo manifestó Cullen Hank, líder de la red global de socios de eBird, afirmando que la plataforma funciona gracias a una gran comunidad. ¨Abarca desde personas que recién comienzan a observar aves hasta aquellos con muchos años de experiencia¨, dijo. Destacó que eventos como este permiten reunir a los observadores para disfrutar, aprender y compartir conocimientos. Asimismo, expresó su alegría por observar aves en Bolivia junto a personas del país, agradeció a WCS y a los organizadores de la jornada.


Esta experiencia motiva más aún las actividades de ciencia ciudadana que viene impulsando WCS para la conservación de la biodiversidad. Rob Wallace destaca la importancia de impulsar la ciencia ciudadana como una forma en que la mayoría urbana pueden contribuir a la conservación, conectarse con la belleza de la naturaleza en general, y aprender sobre la extraordinaria diversidad biológica a través de un grupo tan hermoso como las aves. Las aves no solamente son exquisitas visualmente, tienen además una cantidad de cantos fantásticos. "Espero que todos hayamos despertado temprano alguna vez sonriendo al escuchar cantar a las verdaderas estrellas", dijo Wallace.


La actividad para formar nuevos avistadores fue apoyado por expertos como Isabel Gómez de Aves Bolivianas, Alberto Espinoza de Alwa y Daniela Morales, de WCS Bolivia. Morales explicó que se capacitó a un grupo de ocho personas de la ciudad de La Paz interesadas en aprender sobre la observación de aves y su importancia más allá de la simple contemplación, incluyendo la apreciación de los hábitats y las formas de vida de las especies. Indicó que los participantes, provenientes de distintos ámbitos y sin formación previa en biología o naturaleza, se están convirtiendo en nuevos observadores y naturalistas tras recibir una formación de cinco semanas. Aprovechando la visita del equipo del eBird, compartimos un momento muy especial durante la entrega de certificados a las personas capacitadas en avistamiento de aves. Entre las visitas internacionales, Daniel Arias, coordinador de la red global de socios de eBird en Ecuador, invitó a la comunidad pajarera de Bolivia y Sudamérica a seguir transmitiendo el amor por las aves y la naturaleza, destacando que la observación de aves es una actividad inclusiva que puede disfrutarse en familia o con amigos, sin importar la edad. Además, subrayó el gran potencial que tiene Bolivia en el ámbito del aviturismo y expresó su deseo de que la comunidad de observadores de aves en el país continúe creciendo y atrayendo a visitantes de todo el mundo.


Mabel Castro, una de las nuevas observadoras de aves, es química farmacéutica y aficionada a la observación de aves, expresó su alegría por participar en un encuentro que reunió a expertos dedicados a formar y guiar a los asistentes en el uso de herramientas tecnológicas para conocer mejor la fauna del país. Afirmó sentirse agradecida por la oportunidad de aprendizaje y de conexión con la naturaleza, destacando la riqueza natural del entorno.


Carlos Choquehuanca, guía de Turismo de Jiwasa Travel, se formó como nuevo avistador de aves y comenta la importancia de impulsar desde su área la observación de aves y fomentar un turismo responsable. ¨La observación de aves puede ser una herramienta clave para la conservación de los ecosistemas si se promueve y difunde adecuadamente¨, dijo. Desde su experiencia como guía, destacó que el turismo representa un puente fundamental para que la sociedad civil comprenda el valor de los ecosistemas y la importancia de mantenerlos saludables.


La actividad de Birdwatching o avistamiento de aves va cobrando fuerza año tras año, y no involucra solo a biólogos, también a todos los ciudadanos, sin importar su ocupación o profesión, así se constató con este proyecto que no solo ayuda a que el interés por la ciencia ciudadana crezca en favor de la conservación de nuestra biodiversidad, sino también destaca a las ciudades como espacios importantes para la biodiversidad. Así explica Cecilia Flores Turdera: “Las ciudades están vivas, dentro de sus espacios naturales, en nuestros jardines y plazas podemos encontrar a una biodiversidad que se ha adaptado a la vida urbana, principalmente las aves, no es necesario ir lejos para conectarnos con la naturaleza, y eso es justamente lo que se quiere demostrar con este proyecto. Los nuevos avistadores de aves se capacitaron dentro de estos espacios para conocer y valorar en primera instancia lo que está a su alrededor y con quienes conviven día a día”, resaltó.


A la fecha, según las estadísticas más recientes de Bolivia en eBird, se han registrado 1.431 especies de aves con más de 69 mil listas completas elaboradas por más de 3 mil observadores que reportan sus avistamientos. Los datos corresponden a octubre y revelan que La Paz es el departamento con mayor actividad y diversidad de especies, seguido por Santa Cruz y El Beni. Esta información, recopilada por la plataforma global eBird, muestra cómo la participación ciudadana en la observación de aves contribuye a conocer mejor la biodiversidad de Bolivia y evidencia la creciente importancia del monitoreo comunitario en la conservación de la fauna silvestre boliviana.

Fotografías: Christian Gutiérrez y Diego Im/WCS