Entre los meses de septiembre y noviembre de 2021 se desarrolló la temporada de arreo, captura y esquila de vicuñas en el Área Natural de Manejo Integrado Nacional (ANMIN) Apolobamba. Alrededor de 4.000 vicuñas fueron esquiladas obteniendo cerca de 700 kilos de fibra en bruto, 200 kilos mas respecto a 2019. Participaron 17 comunidades manejadoras de vicuña, y se realizaron un total de 65 actividades de arreo, captura y esquila de vicuñas.
El manejo y aprovechamiento de la fibra de vicuñas es una actividad social comunitaria, donde hombres y mujeres de las comunidades locales, desde los 12 años y hasta la tercera edad, participan cumpliendo diversos roles.
Foto: Humber Alberto/WCS
“Alrededor de 80 a 100 personas por comunidad están involucradas en cada actividad de esquila¨, explica Humber Alberto, Responsable de fortalecimiento de capacidades en aprovechamiento integral y monitoreo de la vicuña en Apolobamba.
El apoyo técnico de Wildlife Conservation Society fue constante durante todo este proceso, orientando las acciones de arreo, captura, esquila mecánica y manejo del vellón, bajo criterios de bienestar animal.
Para dar mayor valor agregado a la fibra obtenida, la siguiente etapa es la del predescerdado, que consiste en extraer manualmente las cerdas, retirando un 10% a 15% todas las cerdas o pelos más gruesos del vellón (el resto de la fibra se vende a empresas que realizan el descerdado industrial). Esta tarea, realizada por las comunidades, ocurrirá entre los meses de febrero y mayo de 2022, en las mismas comunidades o en el centro de acopio.
¨Los beneficios generados por la comercialización de la fibra van a las comunidades manejadoras en un 85 a 90%, aproximadamente, 8% son destinados a instancias del Estado, 3% a la Dirección General de Biodiversidad y Áreas Protegidas del Ministerio de Medio Ambiente y Agua, 2% a los municipios y 3% al Servicio Nacional de Áreas Protegida (SERNAP) y el resto va a gastos de exportación¨, afirma Alberto.
Foto: Humber Alberto/WCS
La fibra de vicuña se vende a países como Italia (2019) y Argentina (2020), y un pequeño porcentaje es adquirido por artesanas de las ciudades de La Paz y El Alto. Actualmente la fibra bruta cuesta aproximadamente 300 dólares americanos por kilo. Las comunidades manejadoras y socios son beneficiarios de estas ganancias que se distribuyen aproximadamente un año después de realizada la esquila.
Por: Cristina pabón