Después de un largo proceso de aprendizaje y resultados exitosos en el manejo sostenible del lagarto, la Asociación “Matusha Aidha” de la TCO Tacana, con el apoyo de Wildlife Conservation Society (WCS), ha conseguido introducir en el menú de Gustu, uno de los restaurantes más reconocidos de América Latina, un plato cuyo ingrediente principal es la carne de lagarto.
Las actividades de manejo del lagarto por comunidades tacanas se iniciaron en 2001, con el apoyo de WCS, mediante la realización de estudios sobre la distribución, abundancia y estructura poblacional de la especie. Sobre la base de esta información, se elaboró un plan de manejo que fue aprobado en 2007 por la Dirección General de Biodiversidad y Áreas Protegidas (DGBAP) y actualizado en 2011. Hasta la fecha se han realizado siete cosechas (2007, 2008, 2010, 2011, 2012, 2013 y 2014), de acuerdo al cupo de extracción anual definido en la normativa boliviana, así como evaluaciones de las poblaciones de la especie en lagunas, arroyos y secciones del río Beni del área de aprovechamiento. Los indicadores de las cosechas (sitios de captura, sexo, talla promedio, peso y esfuerzo invertido) muestran que las poblaciones de lagartos se han mantenido estables durante estos años y que su aprovechamiento es sostenible. Esta cosecha fue planteada como una alternativa al aprovechamiento ilegal que ocurría en la zona y como una estrategia de control de los cuerpos de agua.
Un aspecto fundamental del manejo del lagarto ha sido la conformación de la asociación productiva “Matusha Aidha”, que integra a 23 socios de las comunidades tacanas de Cachichira, San Antonio de Tequeje, Carmen del Emero, Tres Hermanos, Copacabana y Buena Vista, dependiente de la Secretaría de Recursos Naturales de CIPTA. Este sistema de organización del pueblo tacana es uno de los pilares del manejo del lagarto y de su gestión territorial.
La alianza recientemente establecida entre la Asociación Matusha Aidha y el restaurante Gustu es un paso esencial para consolidar esta iniciativa empresarial tacana. Como un primer paso, la asociación le vendió a Gustu más de 70 kg de carne, a un precio que reconoce el compromiso ambiental y social de la asociación. Esta experiencia es una síntesis de la capacidad organizativa de Matusha Aida, el respaldo de CIPTA, el apoyo financiero de la Mancomunidad de Municipios del Norte Paceño Tropicla (MMNPT), el aporte científico y técnico de WCS y la creatividad gastronómica del restaurante. Se comprueba así que se pueden establecer alianzas comerciales y de responsabilidad social para mejorar los medios de vida sostenibles, asegurando la conservación de la vida silvestre.