El 6 de septiembre pasado, Identidad Madidi recibió el segundo premio en la categoría de Recursos Naturales, Medio Ambiente y Biodiversidad, otorgado por el Ministro de Educación Roberto Aguilar, durante la entrega del Premio Plurinacional de Ciencia y Tecnología.
El proyecto de investigación Identidad Madidi fue elegido entre los 28 seleccionados de más de 100 proyectos presentados en seis diferentes categorías. Los otros proyectos premiados fueron conducidos por varias universidades bolivianas, por lo que este reconocimiento tiene una gran significación para los investigadores que participan en Identidad Madidi ya que representan a seis instituciones científicas bolivianas (Instituto de Ecología, Herbario Nacional de Bolivia, Museo Nacional de Historia Natural, Colección Boliviana de Fauna, Museo de Historia Natural Alcide D’Orbigny y Armonía) y a Wildlife Conservatión Socienty.
La presentación de Identidad Madidi al Premio Plurinacional de Ciencia y Tecnología estuvo acompañada de la reciente publicación del Informe Científico 2015 Identidad Madidi, que sintetiza los resultados de los relevamientos de biodiversidad realizados en los primeros seis sitios de estudio en el Parque Nacional Madidi. Contiene una descripción de las características biológicas de cada uno de estos sitios: las sabanas de montaña y bosques de galería, el bosque seco del río Tuichi, el bosque de ceja de monte, el páramo yungueño, la puna altoandina y el bosque de piedemonte amazónico. Presenta además una lista completa de las especies registradas de plantas, mariposas y vertebrados, en 2015, su riqueza y abundancia y las nuevas especies identificadas para Madidi y Bolivia y posiblemente para la ciencia.
Un aspecto que destaca en el informe es la serie de fotografías que incluye de los paisajes y especies de los lugares visitados, que complementan los datos científicos y destacan la biodiversidad más sobresaliente del Parque Nacional Madidi. También introduce mapas de cada sitio de estudio, tablas y gráficos de la riqueza y abundancia de las especies registradas.
Las investigaciones realizadas en 2016 permitieron dar continuidad al relevamiento de la biodiversidad en otros cuatro sitios de estudio previstos en la expedición: bosque de piedemonte del alto río Hondo, bosque montano, bosque montano medio y bosque de nubes superior. En los 10 sitios visitados, entre 2015 y 2016, en un rango altitudinal de entre 250 y 4.750 metros de altura, se registraron 1.020 nuevas especies para Madidi: 278 plantas, 525 mariposas y 217 vertebrados, de las cuales 204 especies son nuevas para Bolivia. Existen además 91 candidatas a nuevas especies para la ciencia.
El último sitio visitado, en el primer semestre de 2017, en las sabanas amazónicas de las Pampas del Heath y los bosques adyacentes, reveló una gran biodiversidad, como era previsible. Las sabanas de esta región se encuentran entre las últimas poco intervenidas que existen en el mundo. En total el equipo de científicos registró más de 600 especies de vertebrados, incluyendo a 65 nuevas especies, entre ellas a los armadillos siete bandas (Dasypus septemcinctus) y amarillo (Euphractus sexcinctus) y al puerco espín brasileño (Coendou prehensilis). La lista de aves de Madidi se incrementó de 1005 a 1011, destacando el saltarín dorso azul (Chiroxiphia pareola), el carpintero blanco (Melanerpes candidus) y el mirasol leonado (Ixobrychus exilis): un nuevo registro para el Parque Nacional Madidi y el Departamento de La Paz.
La expedición científica Identidad Madidi es un proyecto de gran envergadura, no solamente porque involucra a varias de las instituciones científicas más importante de Bolivia, sino por el aporte científico que supone el estudio de regiones poco conocidas y de gran valor para la conservación. Confirmar que Madidi es el área protegida más biodiversa del mundo refuerza su importancia científica y su relevancia como uno de los principales destinos turísticos del país. Contribuye asimismo a los compromisos internacionales de conservación de espacios naturales de alta biodiversidad y fragilidad ecológica. Los conocimientos generados permitirán priorizar sitios para la conservación, profundizar las dinámicas poblacionales de las especies y evaluar en el tiempo los efectos del cambio climático.