Como parte del trabajo que WCS realiza brindando apoyo a proyectos productivos sostenibles, en colaboración con el Fondo de Apoyo a la Sociedad Civil (FOSC) de la Agencia Danesa de Desarrollo Internacional (DANIDA), y en coordinación con un grupo de botánicos del Herbario Nacional de Bolivia, liderado por Freddy Zenteno, se realizaron relevamientos para identificar la diversidad de especies del género Vainilla, presentes en las áreas protegidas de Madidi y Plón Lajas, con potencial para su aprovechamiento. Las colectas científicas y la revisión realizada en el Herbario Nacional de Bolivia permitieron que expertos mexicanos, PhD. Rebeca Menchaca y MSc. Miguel Ángel Lozano, de la Universidad Veracruzana, lograran identificar 10 especies de vainilla, algo realmente extraordinario que confirma la gran diversidad biológica de la región de Madidi.
La vainilla es un género de la familia de las orquídeas que, en estado silvestre, se encuentra en los bosques tropicales, normalmente hasta los 600 metros de altitud. A nivel mundial se han reportado 110 diferentes especies, de las cuales 35 de ellas presentan las características aromáticas que han hecho famosa a la vainilla, todas ellas se encuentran en el continente americano. En Bolivia aún no se conoce la diversidad de especies del género Vanilla, hasta los estudios promovidos por WCS y el Herbario Nacional de Bolivia, únicamente se conocían cuatro especies: V. chamissonis, V. odorata, V. palmarum, V. pompona.
La vainilla es la segunda especia mejor cotizada en el mercado mundial después del azafrán. Por su sabor y propiedades aromáticas tiene un gran valor para la industria gastronómica, cosmética y médica. La vainilla, como muchas otras orquídeas, experimenta un complejo proceso de polinización y su aprovechamiento en estado silvestre es complicado y no suele traer grandes beneficios económicos, por lo que su producción se realiza mediante el establecimiento de cultivos bajo sistemas agroforestales, asegurando la conservación de las especies silvestres para preservar su variabilidad genética.
Existe en el país un gran potencial para establecer cultivos con fines productivos. El hecho de contar con una variedad de especies de vainilla que crecen en estado silvestre, particularmente V. pompona, especie muy solicitada por la industria gastronómica y cosmética, posibilita el establecimiento de plantaciones bajo sistemas agroforestales, ya que las condiciones ambientales son similares y brindan un sustrato rico en materia orgánica.
Con la ayuda de los expertos en vainillas, se confirmó la presencia de dos especies de vainilla en las lagunas Chalalán, Santa Rosa y Caquiahuara, dentro del Parque Nacional Madidi: Vanilla pompona, y en la comunidad de Villa Alcira, se registró V. palmarum. En la revisión realizada con los botánicos del Herbario Nacional de Bolivia, se identificó un nuevo reporte para Bolivia, Vainilla bicolor; adicionalmente, existen otros seis especímenes que no corresponden a ninguna de estas especies anteriormente mencionadas, por lo que los registros para Bolivia podrían incrementarse a 11 especies del género Vanilla.
En las visitas a los sistemas agroforestales de café y de cacao, en el municipio de Guanay y Teoponte, se pudo confirmar la viabilidad de establecer en ellos cultivos de vainilla, mediante la siembra de esquejes para la reproducción de la planta, por la presencia de abundante materia orgánica y árboles de sombra. Los productores manifestaron su interés en incluir este cultivo en sus parcelas, quienes conocen las plantas de vainilla en estado silvestre y están familiarizados con sus propiedades y usos.
En el área de Madidi y su zona de influencia se promueven medios de vida sostenibles en las comunidades locales, generando oportunidades económicas a través del aprovechamiento de recursos naturales bajo planes de manejo. La biodiversidad de Madidi es un recurso valioso, como es el caso de la vainilla, que puede contribuir a la conservación del bosque y a la reducción de la degradación de los ecosistemas.